En las instalaciones de la Escuela de Cerámica de Madrid, dependiente del Ayuntamiento de Madrid, se acaba de celebrar el 20º Freiraum Art con el subtítulo de MADRID BIPOLAR CITY. Este evento ha contado con la colaboración del Foro Cultural de Austria y la empresa cultural madrileña INVESTIGACION Y ARTE. Michiko Totoki ha sido la coordinadora y la propulsora a que este encuentro de artistas se celebrara en Madrid, por lo que todos los asistentes y patrocinadores agradecieron su esfuerzo.
¿Que es Freiraum? La idea nació hace veinte años de la mano de Joseph Bernhardt con cita anual de encuentro con diversos artistas de distintas disciplinas y nacionalidades, y de celebración itinerante por diversas ciudades del mundo. En este sentido se han realizado Freiraum en Austria, Hungría, Italia, Portugal, Japón, España, entre otros países. Mueve un espíritu de compartir experiencias y momentos creativos con otros artistas y culturas, con el añadido de la capacidad de adaptación al medio, pues las obras que se van creando vienen sugeridas por la vivencia de las jornadas. En esta ocasión se procuró, asimismo, crear una bipolaridad, proponiéndose acciones de pareja, así como la dualidad ciudad-naturaleza, de ahí el sobrenombre de Bipolar City.
Y así ha vuelto a ocurrir; igual que en Altamira o en la Quinta del Sordo, y es que ha quedado constancia de alguna de las preocupaciones existenciales de los participantes, verbigracia de la expresión natural que procura el compromiso estético. Esto es así porque aquí no hay intereses materiales, sino una sinceridad autentificada por el esfuerzo de los artistas participantes y la confirmación de que el arte es inmanente espacio de libertad.
Al momento de escribir esta crónica, ya se presentaron los trabajos el 14 de junio, aunque se podrán contemplar, algunos en parte hasta el día 22, en las salas habilitadas para ello en la Escuela de Cerámica de Madrid.
1) Los austriacos Joseph Bernhardt y Martina Stöger, han realizado una serie de trabajos relacionados con los materiales naturales y los reciclados, respectivamente.
2) Joseph Bernhardt, trabajó con la arcilla como elemento base, pues en esa adaptación al medio, era lo que procedía al estar, aquí, en la escuela de Cerámica, así ha desarrollado diferentes expresiones gráficas con este material, representando pájaros o cabezas de pájaros, así mismo ha experimentado con la cerámica, horneando unas semiesferas a modo de representar nidos de aves. Teniendo como referencia el entorno arbolado de lugar, y como expresión iconográfica máxima de libertad, según el artista.
3) Martina Stöger por su parte ha ido en busca del reciclaje, por un lado recogiendo los trozos de cerámica desechados, a los que ha fotografiado, dotando a dicho elementos del protagonismo que parecía perdido. De otro lado a través de los recortes desechados de otro de los participantes, ha operado con ellos a modo de plantillas para realizar unos dibujos de apariencia geométrica y de profunda intención surrealista, en el sentido de que han sido realizadas como si de escritura automática se tratará.
4) La pareja de los japoneses Kishimoto y Yoshimi, vino con la idea de trabajar con el sol de España:
5) Yoshimi, por su parte trajo consigo unos papeles fotosensibles, a los que aplicó objetos que fue encontrando en el lugar de trabajo para insolarlos posteriormente, creando unas imágenes monocromáticas de sutil expresión.
6) Kishimoto, por su parte colaboró en la obra de su compañera, quemando mediante el sol y una lupa, las obras que aquella ya había terminado, dando como veréis una combinación estética carga de temporalidad y apreciable por el encanto fungible del papel. También recurrió al papel, para realizar esculturas de formas geométricas, en algún caso y mascaras geometrizantes en otro, recordando a las caras de los santones que protegen los templos sintoístas.
7) Los españoles Gracia Iglesias y Antonio Moran, resolvieron interpelar sobre la exposición del corazón cualquier humano al mundo, mediante una performance que estuvo cargada de acción dramática, y que explicaba sin palabras, las aventuras a las que el amor sincero se expone.
8) El último dúo, lo compuso Marianela León y Michiko Totoki, con la idea de crear un hilo conductor entre el interior más profundo del ser humano, dígase el anti-yo, y su exposición pública, mediante fotos realizadas a la expresión Butto. Esta disciplina es una expresión solitaria, donde es el cuerpo y no la mente es el que responde a sus propios estímulos, es trágico a la vez que reafirmante de la existencia, ya que su origen está, simplificando, en la réplica de la agonía.
Así Marianela realizó ciertas expresiones Butto, aprovechando el antiguo horno, muy apropiado por su simbología, y Michiko Totoki, compuso la escenografía y tomó las instantáneas fotográficas. Acción que se recreó mediante performance en el acto de clausura.
Alfonso González-Calero
Fotografías de Michiko Totoki: 14 junio 2012, dos momentos de celebración de 20º Freiraum Art – MADRID BIPOLAR CITY en la Escuela de Cerámica, Madrid.